El restaurante Molí de l’Escala, dirigido por el cocinero Jordi Jacas, incorpora cinco nuevas habitaciones a su oferta de salones privados nobles y sala de banquetes.
El alojamiento incluye dos suites, dos habitaciones dobles de lujo y una habitación familiar con altillo. La reforma ha mantenido la estructura del edificio, buscando crear espacios amplios y diáfanos.
Situado en un antiguo molino de harina con más de 23 siglos de historia, el restaurante basa su propuesta gastronómica en el producto de proximidad y de temporada, con un toque creativo que respeta las raíces de la cocina local.